lunes, 18 de julio de 2011

Sieverts y Becquerels

Para aclarar las unidades y números que vemos y escuchamos todos los días, en este post pongo algunas explicaciones básicas tomadas de otras páginas sobre la radioactividad. Yo no soy ninguna experta en la materia, sólo me dedico a juntar información que puede sernos útil a todos. Creo que siempre viene bien repasar estas cosas... ya nos acostumbramos demasiado a escuchar estos términos, pero si hoy me preguntaran qué diferencia hay entre un becquerel y un sievert, no sabría cómo contestar.

La radiactividad se origina por la desintegración de núcleos radiactivos, de forma espontánea o provocada, y el Becquerel (o Becquerelio) es una medición de la desintegración.

Becquerel (Bq): unidad de actividad radiactiva, equivalente a 1 desintegración por segundo. Representa la cantidad de fenómenos emisores de radiación que se han dado en un segundo. Cuantos más sean, más grave es en términos absolutos. Se suele expresar por kilogramo o por litro.

Sin embargo el Becquerel no da idea de la cantidad total de energía absorbida por un cuerpo (cualquier tipo de material). Por eso se ha definido, en el Sistema Internacional, el Gray (Gy), que es la dosis absorbida de radiación ionizante.

Pero el Gray tampoco es suficiente para medir los efectos tiene la radiación sobre los seres vivos, porque no es lo mismo una dosis de radiación recibida en forma de fotones (rayos gamma o X) que la misma dosis recibida en forma de partículas más pesadas (neutrones, protones, radiación alfa), que tienen efectos más nocivos. Por ello se ha tenido que inventar otra unidad, el Sievert.

Sievert (Sv): dosis equivalente de radiación ionizante, resultado de multiplicar el número de grays por dos factores correctores: uno para el tipo de radiación y otro para el tipo de tejido afectado. Representa la cantidad de radiación absorbida por los tejidos de un cuerpo humano o de cualquier otro mamífero. Esta medida es la que nos interesa para saber cuánto nos está afectando la radiación.

Esta dosis se suele expresar por unidad de tiempo para medir la exposición (cantidad de radiación que se absorbe a cada hora que pasa): Sieverts/hora (Sv/h), Grays/hora (Gy/h). Ejemplo: si nos dicen que en un lugar determinado la dosis es de 200 milisieverts/hora (0,2 sieverts/hora), una persona que permanezca ahí cinco horas habrá absorbido 1 sievert.

Ahora, recordemos que los valores que vemos y escuchamos con más frecuencia son Microsieverts (μSv):
1 Microsievert (μSv) = 0,0001 Milisieverts (mSv) = 0,000001 Sieverts (Sv)

1 Sievert (Sv) = 1.000 Milisieverts (mSv) = 1.000.000 Microsieverts (μSv)

Las cpm que nos muestran los contadores Geiger muestran los "impactos" de partículas radioactivas en el detector del aparato y nos sirve para hacernos una idea de la radioactividad general que puede haber, sobre todo para detectar aumentos bruscos.

Convertir Becquerels a Sieverts:
Al parecer no se pueden convertir Becquerels a Sieverts sin saber a ciencia cierta el tipo de radiación de la que se trata (alfa, gamma...), ya que para la conversión se necesitan unos coeficientes específicos (factores correctores que mencioné arriba) para cada tipo de radiación y de tejido. De todos modos, hay gente que sacó algunas fórmulas y armó estos conversores:
No sé hasta qué punto se puede confiar en ellos, pero se pueden tomar como un dato más cuando escuchamos determinadas cifras de Becquerels.

Hasta aquí las unidades de medida. Ahora lo complicado: conocer los verdaderos efectos sobre la salud. Todavía hay mucho debate sobre los efectos directos de la radiación sobre la salud y los niveles mínimos aceptables de radioactividad. Se conoce en un extremo, que los valores que producen náuseas o muerte por radiación, pero cuanto más bajas son las dosis, los datos sobre sus efectos son menos ciertos. Una dosis de 500 milisieverts (mSv) causa síntomas de envenenamiento radiactivo, pero por debajo de esta cifra no existen análisis de correlación que ayuden a sacar conclusiones definitivas.

Un dato generalmente aceptado es el número de cánceres en exceso, es decir, cuántos cánceres de más se dan en una población expuesta a la radioactividad sobre la cifra que cabría esperar estadísticamente en una población similar que no ha sufrido exposición significativa. Pero incluso esta cifra es un tanto especulativa, porque puede deberse a la radiación o a cualquier otro motivo.

Fuentes:
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